El logo de México 68, un referente del diseño que traspasa las fronteras del tiempo

  • Autor de la entrada:
  • Categoría de la entrada:Uncategorized

Las olimpiadas son uno de los eventos más grandes que existen a nivel mundial. Es un evento en donde las diferencias entre los distintos países se ponen de lado, y dan paso a una armoniosa convivencia, en donde se busca por medio del deporte y la competencia fortalecer los lazos existentes entre los diversos países, y este año no ha sido la excepción.

México tuvo la oportunidad de ser sede de los juegos olímpicos de 1968, y con ello trajo un importante proyecto de imagen y desarrollo que mostraría a México como un país merecedor de tal honor. El reto era mostrar a México como un país moderno, lleno de tradición y cultura, resaltando sus puntos fuertes y convenciendo a todo el mundo de las fortalezas de los mexicanos. Para lograr esto se atacó por varios frentes sobresaliendo principalmente la infraestructura para los juegos.

Por otro lado, también se tuvo en cuenta la participación del diseño gráfico. Era necesario para las obras construidas y un sistema de señalización complejo y fue necesario crear un sistema de comunicación visual completo, por lo que los signos visuales y las obras arquitectónicas debían complementarse.

Aquí es donde entra un nombre muy importante: Lance Wyman, un importante diseñador gráfico estadounidense nacido en 1937 que ha hecho la mayoría de sus proyectos en México y se ha convertido en un referente para el diseño mundial. Wyman fue el encargado de crear la imagen gráfica de las olimpiadas de 1968, teniendo a cargo un equipo de diseñadores tanto nacionales como extranjeros.

La identidad gráfica de las Olimpiadas debería justificar la aptitud del lugar de origen; sus costumbres sobrevivientes de la mezcla de culturas, sus comidas; sus contornos; su música; su arte.

 

Tomando como base la idea de Pedro Ramírez Vázquez, para concebir el logotipo se contrapusieron los cinco aros olímpicos y el año de los juegos. Basándose en el logotipo y en motivos huicholes, fue desarrollado el célebre cartel de los juegos olímpicos. Asimismo, este emblema sirvió como base para el alfabeto visual que fue usado durante todas las olimpiadas.

Una de las ideas principales que Wyman usó para el desarrollo de la imagen gráfica, fue reflejar la riqueza de la cultura Mexicana en vez de usar elementos gráficos que estuvieran de moda, y para esto se hizo un estudio exhaustivo de elementos prehispánicos y del arte popular mexicano. El resultado fue una combinación de motivos huicholes con tendencias hacia el pop art, como podemos ver por la repetición de líneas múltiples que forman patrones, complementandolo con el empleo de colores brillantes, los cuáles Wyman consideraba característicos de la cultura mexicana. Con esto, la imagen lograda por los mexicanos contrastaba fuertemente con lo presentado en Tokio en el 64, logrando un sistema de comunicación que iba más allá de medios impresos y señalamientos, viéndose reflejado también en vestimentas y en el diseño urbano.

Seguramente te has encontrado con los diseños de Wyman en más en una ocasión, ya que también desarrolló el logo del Metro de la Ciudad de México y los iconos de las estaciones. Además, realizó los iconos de sus servicios usados también en timbres postales, con toda una integración multidimensional de símbolos, tipografías y colores.

Cabe destacar que, en los años 60, el diseño gráfico era más un lujo, y no existía una formación académica como tal, es decir no existía la carrera de diseño gráfico, pero hoy en día sus diseños son reconocidos a nivel mundial y actualmente el logo de las Olimpiadas de 1968 es usado de manera frecuente a modo de identidad nacional y nostálgica.